Quien no sale en el Capgros no existe, así podríamos definir la publicación por excelencia de Mataro, y sin perjuicio de la otra (Tot Mataro), la que dicta lo que acontece y la importancia que tiene. Hace una semana se produjeron elecciones para compromisarios en el PP de Mataro. Y se produjeron porque existen dos bandos irreconciliables y divergentes.
Uno de esos bandos, acusa al otro (haciéndole flaco favor al partido en mi opinión, aunque en política poco importa el mismo cuando hay intereses personales) de haber roto el consenso de un pacto de caballeros en una lista consensuada (el error precisamente fue ese, el consenso), y ofendidos "de la muerte" acusan al presidente local de juego sucio. Y por otra parte el presidente de las Nuevas Generaciones de Mataro vierte un buen caldero "de mierda" sobre el presidente del partido, al servicio del portavoz de popular y artífice de toda esa "basura".
El hecho es que algo conozco la historia y a los protagonistas (y esto me va sonando, como si lo hubiera vivido). Os podría contar el resto de la historia con riesgo de aburriros y no es mi intención. Pero como algo de política (y momentos difíciles) me tocaron vivir, el tema me "quema" dentro y no puedo evitar soltar un poco de lastre.
Yo, que descreo de la política de partidos (no del servicio al ciudadano), no puedo evitar cierta sonrisa al escuchar a los concejales y portavoz (que al final el interés es de quien es) de la deshonra presidencial. Y no puedo hacerlo porque ellos mismos se ocuparon de "romper" el consenso existente en las último congreso regional catalán y lo hicieron porque bien interesados eran lo intereses de apoyar a la Sra.Nebrera por parte del sr.portavoz (apoyados como no cabía duda en las mágica palabra "renovación", que no es otra cosa, que quítate tu pa´ponerme yo). Y fruto de aquella ruptura del consenso, que no llegó a buen puerto, vienen ahora estos lodos.
Pero aún más, el portavoz ya rompió el consenso, cuando en contra de toda la Junta Local, realizó una lista electoral para el municipio con gente del todo desconocida (pero la confianza y la libertad la tuvo) como los dos concejales que ahora se quejan (ves, para que sirve el consenso).
Pero el portavoz que tonto no es, utiliza a todo bicho viviente para darle caña a la dirección local, ya sean concejales (puestos a dedo) o directivos juveniles (y el caso es que esto lo entiendo, que para eso lo hice yo...). Pero no deja de resultar patético que utilice todo a su alcance (influencia mediática, dinero, puesto...) para defender una postura en la que él mismo no cree (la Nebrera no es la salvadora del PPC, sino una tía que ha sabido moverse en aguas turbulentas, juntando a todo el que pasaba por allí, y esto también me suena...), pero mantiene su puesto de trabajo. Y es que al final, de eso se trata...
4 comentarios:
En estos temas tengo poco o nada que enseñarte, más bien tengo mucho que aprender.
Sólo puedo darte la razón, como ya sabes, por decir lo que dices y desde donde lo dices, pues lo más fácil seria callarte y ... aquí paz y después gloria.
Te honra tu lealtad a la verdad.
Joer Rubén, lo has clavao. De todas maneras te ha faltado una modalidad, que es pegar una ostia a un tercero en la cara del segundo. Me explico, las andanadas no van dirigidas exclusivamente a mi persona, que también, si no más bien a ese que dicen que es amigo mío, que lo es, y que va a ser Secretario General, pero se cubren las espaldas y no se la dan directamente. No obstante lo más asqueroso del caso es que olvidan o directamente omiten que quien será Secretario General de Barcelona y un servidor hemos estado muchas veces en barcos diferentes, pero su miseria no les da para entender que a pesar de ello somos compañeros de partido y además amigo, y que entre él, yo y algunas otras personas de Mataró existen unos lazos que los ismos que nos quieran colocar no pueden romper.
Muchas gracias amigo, te llamo a ver si vemos junto al proscrito y la proscrita de nuevas el Madrid-Juve, con una buena cerveza por en medio.
Yo me apunto a esa cerveza!!!!
Mañana nos vemos entonces, he quedado con Tomás en la peña.
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