Vaya semanita, así, como el programa, o la serie o lo que fuera aquello que llevaba el nombrecito de marras. Ha sido un regreso al pasado, con ración extra de trabajo y con un curso en Madrid la semana que viene de regalo.
Estos días, a parte de trabajar, poco más he podido hacer. Defraudar otra vez a mis "camaradas" (os juro que no encuentro explicación a tanta jodida coincidencia) y despedir como merece a mi Sheila. Lo dicho, faena a base de bien.
Mientras yo me perdía entre papeles, balances y otros análisis, Garzón descubría una nueva "verguenza nacional" con la corrupción de por medio, poniendo un poquito más si es que es posible a Rajoy contra las cuerdas (lo de este hombre es como la Visa, no tiene precio). El mismo juez se dedicaba a cazar con Bermejo (vaya par). Zapatero prometía ahorrar 1.500 millones de gasto corriente para afrontar el gasto social derivado de los más de tres millones y medio de españoles que se han quedado sin trabajo (si el "cabrón" hubiera hecho un presupuesto como Dios manda...) y España jugaba como casi nunca dándole pa´l pelo al "soplagaitas" de Capello.
También mientras el país intenta sacudirse el frío, evitar los aludes y afrontar las crecidas de los ríos de la mejor manera, comienzan las campañas para las Gallegas y las Vascas. Y los asesinos, por fin, no han podido presentarse, no utilizarán el dinero público para seguir atentando y con su ausencia hacen posible que el cambio sea posible. Lo único que me inquieta es si será capaz Patxi López de hacerlo posible.
Por último, también esta semana, de hecho ha sido hace unos minutos, cuando he descubierto el "pedazo" de anuncio que se ha sacado de la manga Heineken, símplemente grandioso...
1 comentario:
no trabajes tanto, que, después....
Por cierto, ya sabes que tenemos pendiente una....
Publicar un comentario