Era domingo por la noche, víspera del día del Pilar. Antes de que el público enloqueciera con El Canto del Loco (quizás uno de sus últimos conciertos, según dieron a entender), cuatro tipos que marcaron un antes y un después en la música de este país, pusieron los acordes necesarios para rememorar miles de inolvidables recuerdos.
Hace unos cuatro años que se volvieron a poner de moda. Mucho antes, cuando todo el mundo parecía haberlos olvidado, yo recopilaba viejos vinilos de los hermanos de mis amigos de Nuez, bailando "Indiana", gritando "Matar a Castro" o símplemente "Temblando" cuando con dieciseis años algo parecía derrumbarse por amores de juventud.
No pertenecen a mi estricta generación musical y tampoco se muy bien como terminaron en convertirse en uno de mis grupos fetiches. Pero días como hoy, en que uno se levanta sin saber muy bien como, tierno, con necesidad de que te abracen, te sorprendes tarareando "Lo noto" y al montarte en el coche buscas desesperadamente "Si yo no te tengo a ti", y miras la carretera creyendo encontrarte en "Nassau".
Hoy ha sido un día de esos, de los que echas demasiadas cosas de menos y que matarías por poder cantar "Venezia" alrededor de unas cervezas, rodeado de los tuyos....."noto que mi corazón, no se, no va.....".....
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