GOBIERNO ZP

Ayer, con bombo y platillo, se presentaron los ministros del nuevo gobierno socialista. Los ya viejos Solbes, De la Vega o Moratinos, junto con las nuevas promesas, fichajes o recuperaciones.

Es evidente que no me gusta, el hecho de ser "socialista" el gobierno, ya hace que lo mire con recelo (el ser humano tiene estas cosas). Pero quiero explicaros mis razones objetivas para que esto sea un poco más comprensible más allá de lo injusto del sentimiento....

No me gustan algunos nombres, pero lo que no me gusta de la formación de un gobierno es que el mismo dependa de los repartos de poder y las compensaciones en relación al voto (por cierto, los del PSOE aragonés que se lo hagan mirar). No me gusta ver como interesa más buscar la foto, la Chacón y las tropas, la igualdad por bandera, la innovación como excusa (el I+D+I ya fracasó con el PP, porque para esto hacen falta "dineros"). Me irrita ver a una nefasta gestora (regado con soberbia y fantasía) repitiendo en un ministerio tan relevante como el de Fomento. Me sofoca ver como el "colegita" de ZP, Sebastián, vuelve (recomendado y agradecido tras lo de Madrid) para hacer sombra a lo único coherente del gobierno (por más que la socialdemocracia solbiana no sea de mi agrado). Me asquea que un "fundamentalista" como Bermejo siga al mando de uno de los tres pilares de la democracia, supuestamente independiente (la justicia me refiero). Me agobia pensar que Moratinos volverá a enfrentarnos a todos las potencias mundiales, para echarnos en las manos de los "porque no te callas". Me enferma pensar importan más poner "bonitos" nombres a los ministerios, muchos nombres, para vaciarlos de contenido, llenarlos de asesores y derrochar a sueldos el superávit.

Sin embargo, es lo que hemos escogido, es lo que hay. Así que a tragar, a cerrar a los ojos, cruzar los dedos...y que Dios reparta suerte...hasta para esto es más fácil ser creyente.