CRISIS, ÓIGANME, CRISIS

Llevamos todo este año, sobre todo desde que llegó la primavera, con los avisos de todos los estamentos, fundaciones, gestoras y "pifostios estudiosos" varios que viene la crisis, que llega, que ya está aquí.

Y como me aburro lo suficiente como para permitírmelo, os haré un pequeño desglose de lo que pienso a cerca de la misma.

Es cierto que la economía da signos de ralentización, cierto que la apreciación del euro perjudica y mucho nuestras exportaciones, cierto que Asia despierta deslocalizando empresas con la consecuente pérdida de empleo. Pero amigos, igual de cierto, ni nuestras instituciones, ni nuestro gobierno en particular ha reaccionado.

La construcción, eje piramidal de todo crecimiento económico por la cantidad de sectores que arrastra, lleva tiempo, meses, dando síntomas de freno y sosiego, el mercado ha regulado, ha frenado lo insostenible y ha corregido las tendencias. Pero de ahí a hundirse hay un trecho, pero lo que no ayuda es la alarma generalizada. Lo diga Rajoy o lo niegue ZP. Uno por interesado, el otro por dejadez.

Uno de los principales problemas de la economía española, es que llevamos 4 de un gobierno que símplemente ha aprovechado la ola, ni ha destensado mercados, ni ha precavido, ni ha fortalecido nuestro sistema competitivo. No es que sea partidario de la intervención, pero el mercado se facilita de herramientas fiscales para buscar salidas. Y precisamente de eso hemos carecido estos 4 años. Ni I+D+I, ni internacionalización, ni liberalización, ni pollas en vinagre. Este gobierno no ha hecho nada y sino, repasad, pensad y buscad y dadme una, mejor dos, para ponerlo más difícil, de recetas económicas para fomentar o prevenir. Y os recuerdo que hablamos de empresas, no de niños con el pan bajo el brazo.

Y aquellos que decidan rebatir mis pensamientos con la "jodida" inflacción, les recuerdo que tras más de medio año de subidas de tipos, estamos en niveles históricos...."perros socialdemócratas".