martes, 8 de abril de 2008

LIADA ONUBENSE I

Este fin de semana asistí a mi tradicional "via crucis tunístico". Huelva era la ciudad elegida para tan magno acto, donde unos cientos de malos músicos y peores cantantes (excepciones las hay) se juntan, bajo la beca roja (de derecho siempre, la única dicen), para dar rienda suelta a viejos recuerdos o nuevas ilusiones.
Y si el año pasado recorrí la península (si dobláramos el mapa casi coinciden Bellver y Almería) para asistir, lo de este no ha sido cosa "chica". Primero le di la satisfacción a mi señora de levantarse a las 4 de la mañana para que me llevara al aeropuerto (cuando hay ilusión....no cuesta...aunque Maribel no opina lo mismo), de Barcelona a Sevilla y allí hice tiempo para ver a mi prima primero y conocer a Alejandro después. Como Laura no es mi prima carnal no se que apelativo le corresponde a su hijo, mis padres han liado en demasía mi vida con primos que no son primos, tíos que tampoco y amigos que sí lo son...
Cerca de las dos de la tarde sonaba mi móvil, el comando Ave, se aproximaba a la capital Andaluza, otra cosa es que tal como iban pudieran hacer descarrilar el tren antes de que eso sucediera, através del aparato sólo se oían graznidos (ellos argumentan que cantaban) y un tío que decía llamarse Pedro que apenas podía juntar dos palabras sin añadir....joder como voy....
El caso es que llegaron y tras coger un taxi me esperaban en la Estación de Armas para emprender camino al Sur (más al sur me refiero). En el autobús, mientras media expedición dormitaba, aproveché para interrogar al Gordo sobre las novedades y sucesos de mis compañeros de Tuna en Zaragoza y así llegamos a tierras onubenses.
Tras el correspondiente taxi al Hotel (este año tocó albergue con recuerdos imborrables...), ducha y a ponerse de negro y terciopelo, ¿Y donde fuimos a parar?, al bar, y al primero que encontramos que total da lo mismo...conversaciones, preguntas, anécdotas...y allí aparecieron lo que promete ser el futuro de la Gloriosa (así llamo al cuadro de borrachos con los que me junto, el caso es hacerlo más digno...), el primero un tío extraordinario, gracioso y diferente, tanto que es Armenio, el segundo un loco, un "girao", pero aun así un buen tío.
La noche trascurrió tan rápido como las copas se vaciaban, las actuaciones comenzaron y le siguieron las escaramuzas y otras locuras, terminé cual Quijote atizando con mi lanza (en este caso zapato derecho) a todo lo que se movía (cosa, digo), y yo era feliz, lo que me pregunto es que hubiera pasado si en uno de aquellos arrebatos, pierdo la puntería y termino con uno sólo todo lo que nos restaba...ideas de bombero lo llama mi amigo Chamo....

1 comentario:

Valquiria Shop dijo...

Anda que no te lo pasas tú bien ni ná. Yo me pregunto ya no cómo hubieras acabado la noche con sólo un zapato sino cómo sería la cara de Maribel viéndote usando tu zapato a modo de lanza cual Quijote XD XD

Ya veo que ni tú ni yo hemos cambiado tanto.

Besotes.